domingo, 26 de abril de 2009

Clausura 1996: Despedida heroica

A mí qué me importa que el Piojo no haya salido campeón con Racing. Qué me importa que haya estado tan cerca, qué me importan los requisitos para ser prócer de un club, que me importa todo. El Piojo se fue de Racing bañado de gloria. No de la gloria que marcan las estadísticas o la historia oficial del Universo, de la verdadera gloria: la fugaz, inexplicable, épica. La gloria que estremece la piel hasta la vulnerabilidad del alma, la gloria que dificulta respirar al recordarla, la gloria del zurdito de 23 años sentado arriba de un arco, moviendo los brazos para regalarle su felicidad a todos los que, felices, aplauden. No aplauden que haya metido un gol para ganar un partido. Aplauden que haya generado ese momento glorioso, de gloria fugaz, de gloria inexplicable, de gloria épica.
Empezaba el Torneo Clausura y el Piojo había vuelto luego de un majestuoso Preolímpico con la Selección y con una oferta muy fuerte del Valencia español para llevárselo en junio. Vamos: se sentía y se palpaba que era el último campeonato de Claudio López en Racing. La Academia, subcampeona en el Apertura, era candidata. Por el cordobés, por el Chelo Delgado, por el Mago Capria, por el Tito Pompei, por Nacho González. El técnico era Miguel Brindisi.
El debut fue a lo Racing: empezó ganándole 2-0 a Argentinos Juniors en el estadio de Huracán (con un López decisivo, asistiendo en el segundo) y tuvo un penal a favor. Pero… pero Capria lo erró, expulsaron a Viqueira y a Chacoma, y Argentinos descontó. Con nueve hombres y el sufrimiento legendario de La Academia, el Piojo enlazó una diagonal interminable de 40 metros, con un enganche, con dos, y con un derechazo tremendo al ángulo de Maltagliatti. Golazo sensacional, de los diez mejores de su carrera. Argentinos 1 Racing 3.





Luego de ganar el clásico ante San Lorenzo en la segunda fecha, tocaba Belgrano en Córdoba. El Piojo, hincha del Pirata desde chiquito, jugó para Racing: a los 23 minutos aprovechó una salida torpe del arquero Labarre, le robó la pelota y clavó el 1-0 con el arco libre. Belgrano lo dio vuelta y empató el Chelo sobre la hora: 2-2.

En la 4ª igualó 1-1 con Vélez, en duelo de candidatos. En la 5ª, en cancha de Banfield, el Piojo otra vez fue clave: le hicieron el penal que Capria transformó en el triunfo 1-0. Racing peleaba bien arriba.
El estigma de La Academia apareció en la 6ª fecha. Movió a Rosario Central por el campo de juego, tocó y buscó, se perdió un par de goles y en la noche de Avellaneda un tal Gordillo aportó la mayor oscuridad: 0-1 con los rosarinos. “Racing no mereció irse derrotado”, certificó El Gráfico.
En la 7ª, el rival más difícil para Racing: River, y en el Monumental. El Piojo, explosivo, metió el primero con una gran definición de zurda en el mano a mano con Germán Burgos. Pero todo terminó dado vuelta y hubo segunda derrota consecutiva: 2-4.
La Academia navegaba entre la hazaña y la desazón todo el tiempo. En la 8ª, Nacho González atajó uno, dos, diez tiros difíciles y Facciuto empató el clásico de Avellaneda: 1-1 con Independiente. ¿El Piojo? Después del arquero, el mejor de Racing.
La desazón nos abrazó en la 9ª fecha. Racing ganaba y gozaba de la dupla Fleita-López, de los Ligeritos, como en los viejos tiempos, pero en el minuto 91 Carlos Bossio se convirtió en el primer arquero en marcar un gol de cabeza en la historia del fútbol argentino. Otro empate 1-1, inmerecidísimo, y parecía que la ilusión de ser campeón se alejaba.
Otro 1-1 (esta vez con Deportivo Español) significaba el golpe definitivo, pero a tres minutos del final de ese partido, aparecieron los Ligeritos: centro en carrera del Piojo López, palomita técnica del Lagarto Fleita y triunfo 2-1.

El Piojo la rompió en la 11ª, contra Gimnasia de Jujuy. Con una jugada hermosa por izquierda que se desvió en Luis Lobo metió el primero a los 14 minutos. “Noche de gala del Piojo --publicó el diario Olé--. Ya no es aquel que definía en una y la tiraba a la calle en otra. No lo pudieron parar. Nadie podrá reprocharle que anda en otra cosa por su pase al Valencia”. Racing ganó 4-1.
Parecía que habría otra fiesta ante Huracán: La Academia iba 2-0, con lindos goles de López (doble amague contra Giuntini y definición pegada al palo derecho de Gutiérrez) y Fleita (también tras amagar en el área). Pero el Globo descontó con un tanto de Gauna en offside y empató a un minuto del final con un tirito que rebotó en Navas. Una ola de mala suerte que terminó con el Piojo expulsado por reírse en la cara del árbitro (el impresentable Daniel Giménez). “Racing había dado, aun antes de este partido, pruebas de tener suerte para la desgracia. El empate no lo creían ni siquiera los del Globo”, intentó explicar Olé.


Luego de cumplir una fecha de suspensión (ajustado triunfo 1-0 ante Platense), Claudio volvió en la 14ª, contra Ferro en Caballito. Qué retorno… El Piojo racinguista en su máxima expresión. A los 9 minutos, le picó la pelota al arquero, que la sacó al corner. A los 15 metió un fierrazo de zurda en el palo. Iba y venía, tocaba y corría. A los 27 le marcó el pase a Pompei, picó perfecto y definió con pierna izquierda: 1-0. A los 31, Delgado metió un centro rasante que Cocca desvió en contra de su arco: 2-0. En el segundo tiempo, a los 10, tras pase de Capria, el Piojo, desde 25 metros, de derecha, por arriba del arquero, metió el 3-0. Golazo sensacional, otro de los diez mejores de su carrera.
“Racing puede ser campeón. Crece con los goles del Piojo, su gente se ilusiona”, estaba estampado en la portada de El Gráfico. “Racing trituró a Ferro con un Piojo López devastador que hizo dos goles, generó una decena de situaciones y dio cátedra a la hora de generar y aprovechar espacios en ataque”, agregaba la crónica de Elías Perugino. “¡Qué infierno la gente! --decía Claudio--. ¿Sabés qué bien se siente cuando les podés dar una alegría así? Porque en Racing sufrimos todos, pero nadie más que ellos”. “El Piojo pica hasta el final –tituló Olé--. La rompió con su habilidad e imparable velocidad. Su segundo gol fue espectacular”.

El título se escapó contra Lanús, en Avellaneda, en otro partido desgraciado. Fue 0-1, a cuatro minutos del final, después de atacar y atacar, después de un tiro de Quiroz en el poste. “Racing fue al frente, pero sobre el final Lanús lo mató con gol de Di Carlo”, explicó la tapa de Olé.
La transferencia hacia Valencia ya estaba concretada y parecía que la despedida del Piojo sería un pálido 0-1 contra Newell’s, en Rosario. Ya no estaban Fleita, Carrario (cuyos contratos habían finalizado), Armentano (vendido al fútbol asiático) ni Delgado (lesionado). López hizo dupla con el novato Raúl Ruiz en ataque y días después viajó a Atlanta para participar en los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, volvió. Con una medalla plateada en el bolso, sin obligaciones contractuales con Racing (ya era jugador de Valencia), incluso arriesgándose a una posible lesión, el Piojo volvió. Volvió y con un zurdazo tan suyo, alto, al ángulo, a nueve minutos del final, le dio a La Academia un 1-0 festejadísimo ante Boca. Y volvió y se fue, se fue sonriendo arriba del arco, frente a la gente de Racing que lo abrazaba a la distancia. Y se fue el Piojo de Racing, dejándome el corazón intermitente. Y se fue el Piojo de Racing, bañado de gloria.

19 Los goles del Piojo en la temporada 95/96: 9 en el Apertura, 8 en el Clausura y 2 en la Supercopa. Jugó 37 partidos.

Todos los partidos de Claudio López en el Clausura 1996
1) vs Argentinos Juniors 3-1 (R. Capria, Carrario, C. López). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 8 (figura).
2) vs San Lorenzo 1-0 (Carrario). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 5.
3) vs Belgrano –Córdoba-- 2-2 (C. López, Delgado). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 6.
4) vs Vélez Sarsfield 1-1 (Pompei). Jugó 74 minutos. Puntaje El Gráfico: 6.
5) vs Banfield 1-0 (R. Capria). Jugó 83 minutos. Puntaje El Gráfico: 5.
6) vs Rosario Central 0-1. Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 4.
7) vs River Plate 2-4 (C. López, Carrario). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 6.
8) vs Independiente 1-1 (Facciuto). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 6.
9) vs Estudiantes 1-1 (Fleita). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 6.
10) vs Deportivo Español 2-1 (Quiroz, Fleita). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 5.
11) vs Gimnasia –Jujuy-- 4-1 (C. López, Fleita 2, R. Capria). Jugó todo el partido. Puntaje Olé: 8 (figura).
12) vs Huracán 2-2 (C. López, Fleita). Jugó 90 minutos. Expulsado. Puntaje Olé: 6.
13) vs Ferro Carril Oeste 3-0 (C. López 2, Cocca en contra). Jugó 76 minutos. Puntaje Olé: 9 (figura).
14) vs Lanús 0-1. Jugó todo el partido. Puntaje Olé: 4.
15) vs Newell’s Old Boys 0-1. Jugó todo el partido. Puntaje Olé: 5.
16) vs Boca Juniors 1-0 (C. López). Puntaje Olé: 7.

Promedio El Gráfico/Olé de Claudio López: 6,00.
Racing finalizó 8º, con 29 puntos.
Campeón:
Vélez Sarsfield.

jueves, 9 de abril de 2009

Preolímpico 1996: Jugaban de lindo...

A mí no me vengan con que sólo cuentan los primeros y esas ganzadas: yo vi, en febrero del ‘96, a la Selección Sub 23. Y mirá que no me gustaban mucho los equipos de Passarella hasta ahí. Pero esos muchachos jugaban de bien, jugaban de lindo…
Era complicado el asunto, eh. Había sólo dos plazas para los Juegos Olímpicos por la que pelearían diez países. Todo largaba con dos grupos de cinco, y pasaban dos a la ronda final. Uf.
El torneo se jugó en Mar del Plata y el debut fue el 18 de febrero contra Ecuador: en el primer tiempo Argentina ya ganaba 3 a 0. El Piojo fue de arranque con el Chelo Delgado, como en Racing, como en el Racing subcampeón que le metió seis a Boca. El Burrito Ortega de enganche y un mediocampo con Bassedas, Almeyda (en nivel altísimo) y Huguito Morales.
Fue un festival en serio, Argentina jugó un partidazo. El Chelo metió tres y, cuando salió el Piojo, entró Hernancito Crespo e hizo el suyo. También ingresaron Gallardo y Verón.
El segundo partido fue contra Chile y en el primer tiempo Argentina ya ganaba 2 a 0. El Piojo otra vez se dedicó a abrirle espacios a Delgado, que metió los dos goles y la rompió. Chile descontó a 15 minutos del final, injustamente.
Dos días después tocaba Venezuela: si Argentina ganaba, accedía a la fase final. Ante la seguidilla de partidos, Passarella rotó algunos jugadores. Así, Verón, Federico Domínguez, Kily González y Crespo fueron titulares. El Piojo, por única vez en el torneo, al banco.
Venezuela, revelación del torneo, apostó a un juego rígido y de pierna fuerte. Así bancó el 0-0 durante sesenta minutos, en los que Rafael Dudamel atajó todo, pero tanto foul los dejó con nueve jugadores. Entonces, Passarella mandó al Piojo a la cancha y el partido se abrió. Gallardo puso el 1-0, el propio López metió el segundo (centro rasante desde la izquierda que empujó de derecha) y el Chelo, claro, el Chelo puso el 3-0 definitivo. “Los chicos del Sub 23 son atrevidos, juegan bien y tienen hambre de gloria”, apostaba El Gráfico en su tapa.


A la Selección le sobró un partido, pero incluso sin presiones el conjunto funcionó a pleno contra Colombia: en 16 minutos ya ganaba 3 a 0. La dupla Crespo-López fue un remolino ofensivo. Hernán metió tres, el Piojo una asistencia hermosa: nacía una dupla que haría historia grande. “Una brillante y lujosa actuación del equipo argentino, con actuaciones individuales destacadísimas”, describió Sólo Fútbol. Terminó 4-0 y Argentina ganó su grupo con puntaje perfecto.
Uruguay, Venezuela y Brasil eran los rivales en la fase decisiva. Argentina se jugaba medio pasaje a Atlanta contra Uruguay, y repitió lo que venía demostrando: en el primer tiempo ya ganaba 2-0. Primero, el Piojo asistió al Chelo, y Delgado la metió de cabeza. Después, el Chelo fue el que asistió, el Piojo dejó al arquero en el piso y la reventó contra la desprotegida red. Argentina administró la pelota en el segundo tiempo y el triunfo significó un paso gigante hacia la clasificación. “El equipo se basa en las ráfagas aladas de ese Claudio Javier López que vuela cual Pájaro Caniggia de 22 años, mete asistencias como si se llamara Bochini y encima golea, como si fuera un Bati-Piojo”. Tremendo elogio de El Gráfico para nuestro cordobés preferido.
Si se le ganaba a Venezuela, Argentina estaría en los Juegos Olímpicos. Iban cinco victorias consecutivas, faltaba sólo una más y el objetivo estaría cumplido, pero… pero otra vez los venezolanos se acomodaron en defensa, otra vez Dudamel atajó mucho, y el 0-0 no se movía. 70 minutos iban: Sorin se mandó al ataque, Crespo liquidó y Argentina, sí, estaba en Atlanta. A dos minutos del final, el Piojo hizo un lindo control de balón por la derecha y metió un remate bajo a la izquierda del arquero. ¡Gol, Piojo! 2-0. Y final.


“Estoy atravesando una buena etapa –explicaba Claudio-, vengo rindiendo en un nivel parejo y las cosas me están saliendo bastante bien. Creo que maduré mucho como jugador. Adquirí experiencia, aprendí muchas cosas de gente mayor que yo, que me enseñó, y las empecé a poner en práctica”.
Argentina-Brasil fue un partidazo. A los 17’, el Piojo metió una corrida, arrastró a dos defensores y le pegó un puntazo a la pelota, bajo, difícil para el arquero Dida: 1-0. No renunció a atacar la Selección de Passarella. Y mirá que mucho no me gustaban los equipos de Passarella, eh. Pero ahí Daniel me ganó: los mandó al ataque, a liquidarlo, a jugar al fútbol, y el Chelo Delgado tocó, rozó, desvió una maniobra de Ortega, muy del Burrito Ortega, y a los 12’ del segundo tiempo la Selección ya estaba 2-0.
Argentina jugó bien durante 628 minutos y la liquidaron en 2. El Preolímpico se le escapó porque a los 23’ y 25’ del complemento hubo un remate animal de Beto que rompió el arco de Cavallero y un centro al área que empujó Savio. Y porque los últimos minutos de más y más ataque albiceleste no alcanzaron. “Argentina practicó un fútbol por momentos brillante”, bancó Sólo Fútbol ante la desazón del empate. El Piojo terminó el torneo con 4 goles en 7 partidos y consolidado como un jugador de Selección.
A mí no me vengan con que sólo cuentan los primeros y esas ganzadas: yo vi, en febrero del ‘96, a la Selección Sub 23. Y mirá que no me gustaban mucho los equipos de Passarella hasta ahí. Pero esos muchachos jugaban de bien, jugaban de lindo…


Todos los partidos de Claudio López en el Torneo Preolímpico 1996

Primera fase
1) vs Ecuador 6-0 (Delgado 3, Morales, Ortega, Crespo). Jugó 59 minutos. Puntaje El Gráfico: 6.
2) vs Chile 2-1 (Delgado 2). Jugó 74 minutos. Puntaje El Gráfico: 6.
3) vs Venezuela 3-0 (Gallardo, C. López, Delgado). Jugó 35 minutos. Puntaje El Gráfico: 6.
4) vs Colombia 4-0 (Crespo 3, C. González). Jugó 79 minutos. Puntaje El Gráfico: 7.

Ronda final
5) vs Uruguay 2-0 (Delgado, C. López). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 8.
6) vs Venezuela 2-0 (Crespo, C. López). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 6.
7) vs Brasil 2-2 (C. López, Delgado). Jugó todo el partido. Puntaje El Gráfico: 7.

Promedio El Gráfico de Claudio López: 6,57.
Argentina, subcampeona, clasifica para los Juegos Olímpicos.

Campeón: Brasil.